El 31 de octubre fue un día mágico, nuestro colegio se lleno de dulces y disfraces creativos durante la celebración de Halloween. Los estudiantes, emocionados y ansiosos por el espíritu festivo, se unieron a la diversión luciendo disfraces.
Bajo la atenta mirada de los profesores y con el espíritu colaborativo en su apogeo, los niños se aventuraron de aula en aula “pidiendo dulces”. La creatividad se desbordaba en cada disfraz, y la alegría se reflejaba en las caras sonrientes de los niños.
Esta celebración no solo fomentó la diversión, sino también la creatividad, el compañerismo y la expresión personal de los estudiantes. Al final del día los niños estaban llenos de dulces y alegría.